Hoy Día Internacional de los Derechos Humanos, todo el equipo de Innovation and Human Rights celebramos el tercer aniversario de nuestra asociación sin ánimo de lucro. Compartimos nuestra satisfacción por haber creado y mantener online la base de datos centralizada de víctimas y personas represaliadas durante la Guerra Civil y el franquismo , que a día de hoy integra 700.000 registros referenciados a archivos e investigaciones. También manifestamos nuestra determinación a continuar.
El big data de la represión
Hasta el momento, la mayoría de registros, en concreto 485.136, son de procedimientos judiciales militares procedentes de diversos archivos del Ministerio de Defensa, que hemos centralizado por primera vez. Corresponden únicamente al Ejército de Tierra en once provincias españolas.
Promover el acceso a la documentación de la Guerra Civil y perseverar en la base de datos no siempre ha sido fácil. No hemos recibido ayuda de ninguna administración pública. A menudo hemos topado con límites al acceso porque el reglamento general de protección de datos se interpreta de la manera más estricta posible. Además, nuestro trabajo es atípico: encontramos datos históricos ya publicados y los homogeneizamos para hacerlos buscables.
Trabajo en equipo
Nada de lo que hemos hecho habría sido posible sin: (1) todas y cada una de las estupendas personas que forman parte o han colaborado con Innovation and Human Rights: profesionales del Periodismo, la Informática, la Historia y la Archivística, entre otros. (2) el trabajo de los archivos, y sus profesionales que describen la documentación y la facilitan a quienes investigan (3) los/as autores/as que han contribuido a enriquecer la base de datos con el fruto de sus investigaciones (4) las personas que siempre nos han prestado su apoyo, cada una desde su posición; ellas saben quienes son. No solo archiveros/as, historiadores/as, informáticos/as, asociaciones de víctimas y otros/as, con quienes mantenemos un contacto continuado, sino también personas anónimas que nos descubren, nos escriben y, o bien agradecen nuestro trabajo altruista o bien nos encargan trabajos que nos permiten sobrevivir como asociación.
Tejiendo redes
También estamos muy satisfechas y agradecidas porque hemos firmado convenios de colaboración con la Associació d’Arxivers i Gestors Documentals de Catalunya, la Universidad de Santiago de Compostela, el CRAI Pavelló de la República de la Universitat de Barcelona (UB), la Fundación Pablo Iglesias y, recientemente, la Fundació Universitat Autònoma de Barcelona (FUAB). Además, hemos recibido estudiantes en prácticas de Periodismo e Historia de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Actualmente estamos ampliando estos acuerdos.
El embrión de IHR fue el proyecto multimedia 800 días bajo las bombas , sobre la Guerra Civil en Barcelona, para betevé (entonces Barcelona Televisió), que incorporaba una base de datos de personas fallecidas por bombardeo. Ya entonces nos indignó que fuera tan difícil para los familiares de las víctimas acceder a información, ochenta años después. En noviembre de 2017 presentamos la base de datos, en aquel momento con 224.000 registros online, en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona. Aquel día me acompañaron Guillermo Blasco, socio fundador, y Javier Rodrigo, Doctor en Historia y experto en fascismos, guerra civil y violencia colectiva, que destacó la importancia de una iniciativa que permitiera cruzar datos y enriquecer el conocimiento histórico.
Objetivos 2020
A corto plazo, acabaremos de documentar nuestra metodología para que nuestro trabajo se pueda replicar y para mejorar nuestra productividad. “El principal reto es que cada conjunto de datos tiene una estructura diferente que a menudo viene determinada por su contenido,” dice Carla Ymbern, experta en Periodismo de Datos, en IHR desde 2017. “Verificamos que no haya valores duplicados o incompletos, y que no se haya omitido ninguno al convertir el fichero en datos reutilizables. Cuando tenemos la certeza de que los datos son correctos, identificamos los campos relevantes y limpiamos los datos aplicando unos criterios establecidos”.
Buscamos también seguir incrementando el volumen de datos, que hemos triplicado en dos años. Trabajamos para establecer nuevas alianzas y lanzar más proyectos. A medio plazo, se mantiene el reto de mejorar el concepto y la accesibilidad de la base de datos para poder cruzar más datos. Centralizar todos los campos de la información supondrá un salto cualitativo para contribuir a la investigación historiográfica.
Nuestra ambición es global, no se centra en un área geográfica. “España y su gente han sido muy generosas conmigo desde mi primera visita en 1974 –en palabras de Charlie Nurse, historiador que elabora la versión inglesa de esta web desde Cambridge–. Creo que este proyecto ayuda a la sociedad española a entender y asumir su pasado más reciente». Como conclusión, se mantienen nuestros objetivos de facilitar el acceso a la información, difundir el trabajo de los archivos y contribuir a la investigación histórica.